lunes, 10 de junio de 2013

POR UN ACUERDO NACIONAL DE TELEVISION

El Servicio Público de Televisión en Colombia se ha concebido, Independiente, Autónomo, Plural, Representativo y sus contenidos libremente expresivos, pero el ordenamiento jurídico en materia de la televisión Colombiana ha estado  mal estructurado, caótico y disgregada, pues ni el legislativo  ni el Ejecutivo han podido comprender como funciona, como crear el Sistema Nacional de Televisión , como opera el sector y menos aun como diferenciar el producto final de toda la cadena productiva, por ello, se ha subestimado a los trabajadores del sector, al negocio y a la incidencia que tienen sus contenidos en la opinión pública, en la formación del ciudadano televidente y en la educación de nuestras niñas, niños, adolescentes y jóvenes.

El estado ha permitido una serie de confusiones conceptuales en los ciudadanos que en su gran mayoría no comprenden la diferencia que hay entre el Servicio Público de televisión y la televisión operada y administrada por el sector público o por el sector privado,  tampoco la diferencia existente entre la televisión de cubrimiento Nacional, Regional y Local con ánimo y sin ánimo de lucro, menos aún la diferencia entre la televisión  radiada y la televisión por suscripción comercial cableado, satelital y comunitaria, pero aun, algo más complicado está en la definición propia del Servicio y del concepto de televisión que se debe aclarar sin importar la plataforma de transmisión y recepción  de los contenidos que bien puede ser un televisor, un computador u otro aparato de cualquier tecnología emergente, así mismo, se debe ser taxativo en la ley para que no quepa duda si la televisión es considerada un medio masivo de comunicación y medio audiovisual, dentro de las telecomunicaciones.

Resulta sorprendente que en Colombia se presente desigualdad en el Servicio de Televisión a pesar de ser un Servicio Público, como sucede por ejemplo con la discriminación a la que está sometida la televisión del orden regional frente a la televisión del orden Nacional, la existencia de un solo canal local con ánimo de lucro que funciona en Bogotá, el monopolio en la televisión por suscripción y la falta de seguridad social y laboral de los trabajadores de la industria de la televisión, por todo ello, solo a manera de ilustración cabe anotar que hay un gran vacío jurídico en torno a los contratos que realiza la televisión nacional y los que realizan los canales regionales, por una lado a unos se les llaman concesiones y por el otro se les llaman contratos de producción, coproducción y cesión de derechos de emisión, pero sin hacer referencia clara y precisa sobre la naturaleza jurídica de los mismos, sin tener la claridad si estos son concesiones o no lo son, puesto que, estos contratos cumplen con todo lo que es una concesión del Estado, pero su nombre no lo tipifica como tal.

Se le ha hecho creer al ciudadano televidente y ciudadanía en general, que en la nueva ANTV existe pluralidad, representatividad y autonomía, pero cuando se revisa la ley y la estructura real de la Junta Directiva de la Institución encontramos pura demagogia, por un lado, el Ministerio de Tics o su delegado tienen asiento directo con voz y con voto, el Presiente de la República tiene un delegado, es decir el ejecutivo ya entra con  dos miembros en la Junta de cinco, pero adicionalmente puede sesionar con tres miembros, dando una clara mayoría al Gobierno Nacional que de entrada cuenta con el 40% de la junta cuando es de 5, pero si es de 4 ya tiene el 50%, y si es de 3 cuenta con la abrumadora mayoría de casi el 70%, pero si a ello se le suma que los Canales Regionales ya no cuentan con asiento en la junta porque su participación fue cambiada por un representante de los gobernadores, se le podría estar sumando al ejecutivo un 60% en una junta de 5, o en su defecto unanimidad en una Junta de 3 y esta entidad es la que llamamos ENTE AUTÓNOMO INDEPENDIENTE.

La ANTV como nuevo Ente Rector de la Televisión Nacional por derecho propio tendría asiento en las Juntas administradoras de los Canales Regionales, como hasta hace 1 año lo hacia la CNTV, pero en su sabio entender renuncio a este derecho, según lo manifestó la Junta directiva de la ANTV para no generar un conflicto de interés siendo parte y juez, por consiguiente solo se dedicaría  a hacer el seguimiento, control y evaluación  de los Canales Regionales y sus Juntas Administradoras, decisión está que en principio podría considerarse lo más sano, loable y pertinente para generar autonomía regional.

Se le olvida a la ANTV que le Ministerio de Tics hace parte de todas las Juntas administradoras de los canales y que en algunos de ellos tiene una participación de más del 50% y, que así mismo, hace parte de la Junta Nacional de la ANTV con el 20%  de la misma, es decir, una clara contradicción, por que por lo menos el 20% de la ANTV sigue haciendo parte en la toma de decisiones de los canales, pero a la fecha no conocemos de pronunciamiento alguno, sobre la corrupción galopante que existe en por lo menos uno de los canales regionales, demostrándonos que ahora no son ni juez ni parte, puesto que no conocemos de seguimientos, controles y menos aun evaluaciones o por lo menos pronunciamientos a este respecto.

Era de esperarse que la ANTV estuviese amordazada para pronunciarse frente a los Canales Regionales, pues políticamente no pueden desautorizar ninguna decisión tomada en ellos, ya que el Ministro de Tics o su viceministro hace parte de las dos Juntas, teniendo en la de la ANTV un 20%, sumado este al 20% del Representante de los gobernadores, que aunque no hace parte de las Juntas Administradoras de los Canales Regionales, a quienes él representa y le postularon si, pues los mandatarios territoriales hacen la mayoría en las Juntas Administradoras; además le debemos sumar el otro 20% del Representante del Presidente, que tampoco pertenece a las Juntas Administradoras de los canales Regionales pero obviamente es solidario con las decisiones del Ministro de tics en las dos Juntas, sumando de esta manera entre los tres (3)  el 60%  de la Junta Nacional de la ANTV y, por si fuera poco, la nueva ley de Televisión, estableció que se puede sesionar y tomar decisiones con solo tres (3) de los cinco (5) miembros por los que está compuesta la Junta.

La nueva ley haciendo creer que existe un Ente Autónomo e Independiente del Ejecutivo,  le dio participación además del Ministro de Tics o su delegado, del representante del Presidente, del representante que postulan los gobernadores, del representante que postulan las Universidades, a un delegado de la sociedad civil, pero que no representa a nadie, porque la Ministra de Educación haciéndoles el quite a los trabajadores de la televisión, a las Instituciones gremiales y sindicales del sector y, demás sociedad civil, abrió un concurso donde cualquier ciudadano se puede postular y una universidad que puede no saber nada de televisión  selecciona al ganador, sin mediar comunicación alguna de la sociedad civil, en donde de manera estratégica el Ministerio confundió los conceptos de SOCIEDAD CIVIL con el de CIUDADANO, haciendo que esta elección a todas luces sea ilegitima e ilegal.

Sin hilar muy delgado se pretendió dejar por fuera de la Junta a los trabajadores del sector, a los representantes de los gremios y a una gran mayoría de profesionales del país con conocimientos reales de la televisión, sin argumento alguno por parte del ejecutivo, actuando en su representación el Dr. GERMAN VARGAS LLERAS y el Señor MINISTRO DE TICS y, en nombre del pueblo colombiano los HONORABLES CONGRESISTAS, decidieron que los miembros de Junta deben: "tener título profesional en derecho, comunicación social, periodismo, psicología, sociología, economía, educación, negocios internacionales, administración financiera, pública o de empresas; ingeniería de telecomunicaciones, eléctrica, electrónica, mecatrónica, financiera, civil, de sistemas o mecánica; cine y televisión. ,  3. Tener título de maestría o doctorado en áreas afines con las funciones del cargo. En caso de no contar con título de maestría o doctorado, deberá acreditar al menos diez (10) años de experiencia y una especialización en los sectores a que hace referencia el numeral segundo del presente artículo. 4. Tener ocho (8) años o más de experiencia profesional en el sector de las tecnologías de la información, de las telecomunicaciones, cultura y educación."

Para ser miembro de la Junta Nacional del ente Rector de la televisión la ley avaló profesionales tales como la ingeniería civil, que muy poco, por no decir que nada, tiene que ver con la televisión y, por el contrario no se avalaron profesiones históricamente propias del medio como son la literatura, los profesionales en medios audiovisuales, la antropología, la filosofía, el trabajo social, los artistas, los actores, tecnología emergentes, etc…

Resulta muy preocupante que la nueva ley de televisión excluya de la Junta Nacional de la ANTV a los trabajadores de la Industria de la televisión, que han dedicado su vida a su profesión como libretistas, directores, actores, periodistas, presentadores etc. En ese miso sentido, esta ley también vulnera los derechos de los periodistas y comunicadores sociales exigiéndoles título universitario, maestrías y doctorados para ser miembro de la Junta Nacional excepto si se es ministro de Tics,  yendo en contra-vía del ordenamiento jurídico colombiano y de las sentencias de las Altas Cortes

En ese orden de ideas, es necesario que en Colombia:

1. Se unifique la jurisprudencia, leyes y normas de la Televisión. 

2. Se cree el Sistema Nacional de Televisión. 

3. Se realice un registro único de las entidades gremiales profesionales y sindicales del sector.

4. Se haga un censo de los trabajadores de la Industria.

5. Se establezcan las cuotas de pantalla nacional y los canales de producción propia.
6. Se protejan los derechos laborales y sociales de los trabajadores de la Industria.

7. Se regule el acceso a los recursos del FONDO DE PROMOCIÓN DE LA TELEVISIÓN.

8. Se generen acuerdos sobre el uso del recurso Público en la Televisión Regional y Nacional.

9. Se promocione y realice un gran debate sobre los Canales Regionales y la forma de la composición de sus Juntas Administradoras dándole representación de la Sociedad Civil Regional.

10. Se construya de manera participativa el PLAN DECENAL DE LA TELEVISIÓN.

11. Se consolide un gran acuerdo nacional para la existencia y funcionamiento de un ENTE AUTÓNOMO.

12. Se debata sobre la pertinencia de la ANTV y se concluya si debe desaparecer, reorientarse o convertirse en la secretaria de este nuevo ENTE.

13. Se reoriente el Servicio Público de Televisión.


14. Se comprometa al Servicio Público de Educación de incorporar a la Televisión en programas de formación y capacitación de los ciudadanos televidentes.

lunes, 27 de mayo de 2013

TELECARIBE SE ENRUTA O DESAPARECE LUEGO DE LA ELECCIÓN DE NUEVO(A) GERENTE EN PROPIEDAD



TELECARIBE es el Canal Público de Televisión Regional de la Costa Caribe Colombiana, que hace parte del SERVICIO PUBLICO DE TELEVISIÓN NACIONAL, siendo el medio de comunicación más importante de la región; su Junta Administradora se concibió plural y participativa, teniendo asiento con voz y voto al día de hoy los Representantes Legales de las Gobernaciones del Atlántico, Bolívar, César, Córdoba, Guajira, Magdalena y Sucre, de las Universidades de Cartagena y del Magdalena, de la Alcaldía de Barranquilla y del Ministerio de Tics, bajo la inspección y vigilancia de la ANTV.

El canal Telecaribe se concibe jurídicamente como una Empresa Industrial y Comercial del Estado del orden Nacional, que se pensó como el vehículo natural de integración regional, para que siete (7)  de sus socios, los Gobernadores de la Región que son la mayoría de la Junta,  se dieran la oportunidad de encontrarse en cumbres mensuales para crear proyectos, discutir sobre temas y transmitir mensajes de regionalización, a todas  y todos los habitantes de la región más solida culturalmente hablando que tiene el país, usando como excusa la televisión.

Todo lo que se soñó para Telecaribe en un país descentralizado, con regiones autónomas y cero corrupción, se vio opacado, cuando los mismos gobernadores, no dándole la importancia al canal regional buscaron hacerse representar en la Junta por delegados, que de manera histórica fueron en su mayoría miembros de los equipos de prensa de los entes territoriales y, de la misma manera le dieron un inmenso poder en la dirección del canal a la gerencia, desdibujando las responsabilidades y toma de decisiones de la Junta Administradora y del cargo propio del Gerente.

Se les olvido a todos los Titulares de la Junta Administradora, que además todos son funcionarios públicos, que así se hagan representar por delegados, ello no les disminuye ni les exime de sus responsabilidades fiscales, disciplinarias y penales, frente a las decisiones que se tomen  en la Junta en contra del ordenamiento jurídico Colombiano, pero peor aún, se les olvidó a los Gobernadores que su no participación activa en la Junta Administradora de Telecaribe está deslegitimando la base fundamental sobre la cual se concibieron y crearon los Canales Regionales.

Las Juntas servirían para diseñar procesos de consolidación Regional, que al día de hoy casi desaparecieron en su totalidad, ya que, no son la prioridad de los delegados de los Gobernadores socios del canal, por el contrario, en las Juntas se discuten temas de administración, logística, economía, personal, estatutos y en ocasiones de contratos y licitaciones públicas, dejando de lado la integración y los asuntos políticos propios del fuero del gobernador, por ello, ya no es indispensable la presencia de los titulares de las gobernaciones y los delegados hacen lo mejor que pueden en este ejercicio y, como la mayoría han sido comunicadores opinan y sugieren en los contenidos y otros pocos que son abogados hacen de las Juntas disertaciones jurídicas como otrora lo hiciera la CNTV.

Estos temas cotidianos de Telecaribe también son importantes, mas no son los únicos ni los verdaderamente necesarios en una Junta Administradora de un canal Regional, pero es allí, donde de manera estratégica y miope, algunos delegados con el apoyo de algunos gerentes, para no perder su permanencia y poder de decisión en el canal, desmotivaron la presencia activa de los titulares, convirtieron estos temas estrictamente técnicos en el hilo conductor de las que se pensaban serian las cumbres mensuales de los Gobernadores, mientras tanto, la función social y las base conceptuales, filosóficas y políticas del canal regional desaparecieron, de esta manera, el canal como instancia fundamental de integración regional pasa a un segundo y hasta tercer plano, usurpando su lugar privilegiado la viabilidad económica y financiera de una Empresa Industrial y Comercial del Estado que se está administrando igual que cualquier otra, como una lotería o una licorera, olvidando que hace parte de UN SERVICIO PUBLICO.

La Razón de ser de los Canales Regionales es el Servicio Público de Televisión Regional, que con los dineros que llegan del nivel Nacional y de las empresas cableoperadoras, se debe producir o comprar contenidos audiovisuales educativos y culturales de calidad como lo estableció el Consejo de Estado  “…….Así pues, los canales regionales de televisión……. están obligados a cumplir una función preferentemente cultural. Inclusive, la autorización para constituir un canal regional está supeditada a la condición de que se le dé un carácter esencialmente educativo y cultural……..De modo que, aunque en su reglamentación se permita la transmisión de algunos programas de carácter informativo y recreativo, la función primordial de los canales regionales es la de difundir la cultura, con sujeción en su orientación, coordinación y control, en los términos de las leyes y estatutos que los rijan……….”

La función de la Gerencia de un Canal Regional de Televisión esta fundamentalmente en gestionar nuevos recursos para el desarrollo de proyectos de gran envergadura cultural y educativa regional; en posicionar productos en el mercado regional, nacional e internacional, en apoyar planes, programas y proyectos propios de la región, de la televisión y de la participación democrática; en realizar convocatorias para una sana y transparente asignación de los recursos públicos tanto los que llegan por vía ANTV, como los que llegan por vía de impuestos o por pagos de las productoras; en hacer las adecuaciones tecnológicas para llevar la señal a todos los rincones de la región; en hacer gestión ante los sistemas de televisión para que los contenidos los recepcionen la mayor cantidad de televisores del país y del exterior; en administrar una excelente, creativa e innovadora parrilla de programación que despierte el interés de los ciudadanos televidentes, haciendo del canal una alternativa viable y verdaderamente competitiva en la sobre oferta de contenidos audiovisuales,  de esta manera, la gerencia no solo se dedicará a gerenciar y administrar eficaz y eficientemente la entidad preocupados solo por los contenidos, por el nombramientos de planta de personal y la adjudicación de contratos de producción, cesión de derechos de  emisión, coproducción y la compra de programación con el presupuesto que llega por vías nacionales, como ha venido ocurriendo.

Hoy que nos encontramos a portas de la selección de un nuevo gerente, esperamos que los gobernadores y alcaldesa encuentren una hoja de ruta que reincorpore al canal en la vía de cohesión y participación ciudadana de la región Caribe, recuperando su vocación política para mejorar el bienestar y la calidad de vida de los habitantes de la región y, el fortalecimiento del Servicio Público de televisión  con apoyo a la industria representada en los productores independientes.

El llamado lo hacemos a los mandatarios territoriales, puesto que el Ministerio tiene otras prioridades diferentes al tema de integración y, las Universidades estarán  velando por la función educadora que le compete canal, por ello, se debe hacer una optima elección de un Gerente que entienda y coadyuve en esta tarea, que sea una mujer o un hombre PROBO, que no prime el lugar de su nacimiento, ni sus títulos académicos, ni el área de la profesión, sino que sea indispensable su buena hoja de vida que pueda ser analizada y verificada por todas y todos, que no tenga cuestionamientos de corrupción, que tenga experiencia administrativa con una férrea ética y moral comprobada y comprobable, pero fundamentalmente que quien se elija sea una buena persona que se distinga por ser, respetuoso, protector y defensor de lo público, sabiendo que será un(a) Servidor(a) Publico(a) que estará al servicio de su Junta y de toda la Región y no que sienta que la Junta y la Región están a su servicio.

Como estamos seguros que se hará una buena elección de la persona que gerenciará el canal y conocedores del talante de los Gobernadores, de la Alcaldesa, de los Rectores y del Ministro, sabemos que harán una excelente hoja de ruta partiendo de una estricta evaluación y seguimiento de la parrilla de programación con un claro sentido educativo y cultural, e invertirán en un estudio sobre la percepción de los ciudadanos televidentes de la programación del canal, principalmente los contenidos que se realizan con recursos públicos, que son la gran mayoría, porque solo los noticieros y programas de opinión se adjudican en licitación pública y se producen única y exclusivamente con recursos propios de la empresas productoras.

De esta manera el canal contará con productos de calidad que permitan que los televidentes se sientan identificados en ellos, para que quien quiera pueda presentar propuestas de programas con un acceso equitativo y descentralizado en la parrilla de programación del canal, todo ello, sumado a las iniciativas de la nueva gerencia y de la Junta Administradora permitirá que Telecaribe realmente sea un canal Regional, justificando que el Fondo de Promoción de la Televisión siga financiando parte de su programación de carácter cultual, regional e integradora, acallando las voces de aquellos que piden una reestructuración del ordenamiento jurídico en  materia de televisión para  que el Estado no siga financiando los canales regionales, obligándolos a convertirse en autosostenibles con recursos propios, similares al funcionamiento de la televisión privada.

lunes, 13 de mayo de 2013

DE LA CNTV A LA ANTV, O LA DESAPARICIÓN DEL ENTE ATUNOMO DE TELEVSION

El espíritu de la creación del "Ente Autónomo" para regular la televisión en Colombia en la Constitución del año 1991, se desdibujó desde el mismo nacimiento de la ley de televisión y creación de la Comisión Nacional de Televisión CNTV, pero aún así, era menos malo que en lo que quedo convertido el ente autónomo con la nueva ley de television y la creación de la Autoridad Nacional de Televisión ANTV, que no pasa de ser un simple saludo a la bandera en lo que hace referencia a la autonomía e independencia, porque ahora el Ente Autónomo no es mas que el brazo legalizador del ejecutivo de los temas de la televisión.

La Constitución pretendió que la Televisión fuera salvaguardada de manipulaciones y, que no fuera coptada por emporios económicos ni ideologías políticas, para ello, le alejo de las manos de los gobiernos de turno, esperando que así se lograría la independencia y democracia televisiva en la información, el entretenimiento y la formación.

Para que el Ente Autónomo cumpliera con su misión y visión se le apostó a otorgarle autonomía financiera, administrativa, técnica, jurídica y con total libertad en la regulación del uso del espectro electromagnético para la televisión; como bien sabían los constituyentes el servicio público de television es un asunto de soberanía nacional, por ello se decidió otorgarle adicionalmente el control de los contenidos en la construcción del modelo de la televisión que Colombia quiere y necesita.

Se pensó en una institución pluri-participativa, transparente y múlti-representativa con 5 comisionados donde tuviera asiento dos miembros de junta el gobierno nacional y uno mas los canales regionales, con miras al fortalecimiento de la descentralización y el desarrollo territorial, y para los otros 2 comisionados se le otorgo al legislativo la potestad de reglamentarlos mediante la ley de televisión, protegiendo así mismo, los derechos de los trabajadores de INRAVISIÓN.

La ley y su reglamentación por fin fueron realidad gracias a las antesalas en el congreso de los trabajadores de la televisión y las asociaciones sindicales y gremiales que impulsaron que los otros dos comisionados fueran miembros de la sociedad civil en representación de la educación, los padres de familia, los ciudadanos televidentes y los trabajadores de la televisión.

Asi nace el Ente Autónomo llamado CNTV con el espíritu y aspiración de ser un cuerpo colegiado, desinteresado y justo, pero el gobierno nacional solo miro hacia juristas representantes mas que del ejecutivo de los partidos políticos, permitiendo la creación de islas mezquinas que se cuidaban unas de otras con un desbordado afán de poder y protagonismo, llegando incluso a tratar de llevar a los estrados judiciales y hasta a la cárcel a sus compañeros de junta.

La ley de Televisión le otorgó al mismo ejecutivo la reglamentación para la elección de los otros 3 miembros de juntas, cosa que nunca pudo realizar de una manera optima, transparente y legitima, pues los decretos reglamentarios que emanaba la secretaria general del misnisterio de comunicaciones y luego de Tics quedaban mal elaborados, o bien por desconocimiento total del sector, o bien por favorecer a uno u otro interés, lo cierto es que no fue posible crear el Sistema Nacional de Televisión, menos aún el registro único de trabajadores y de instituciones de la ciudad civil del sector y, el mismo ejecutivo corrompió.  los procesos de elección.

La sociedad civil sin la madurez y experiencia suficiente en las instancias de participación y de toma de decisiones, terminó coptada y manipulada por intereses oscuros, electoreros, politiqueros y económicos, que sirvieron de caldo de cultivo para enriquecer a algunos, empobrecer a otros y, generar el ambiente perfecto para que el ejecutivo y el congreso redactaran el acta de defunción y se quedaran con el botín económico del Fondo de Promoción de la televisión, quitandole a la televisión su autonomia e independencia con la creación de una inútil e inoperante ANTV que hasta el día de hoy no ha mostrado nada nuevo, nada diferente que la otrora CNTV.

Quedan unas preguntas sin respuestas aún:

¿ porqué el Ejecutivo hablaba acertadamente de corrupción? Si el presidente nombraba a 2 miembros en la Junta y adicionalmente se le sumaba un tercero en la votaciones porque el representante de los canales regionales se debe a los gobernadores.

¿ Porqué se permitió que todos los congresistas tuvieran cuotas burocráticas si los que nombraban al personal de la CNTV era la junta en pleno donde el ejecutivo tenía la mayoría y se hablaba de malos empleados?

¿ Porque el ejecutivo ahogó económicamente a la CNTV obligándola a asumir el pasivo pensional de INRAVISIÓN tras su eliminación inconstitucional ?

¿ Porque el ejecutivo necesitaba quitarle el rango constitucional al Ente Autónomo eliminado el articulo 76 y modificando el 77, si para reformar a la CNTV solo tenía que modificar la ley de television ?

¿ Porque eliminó una de las pocas instancias de participación de la sociedad civil, sin dejar madurar un proceso, cuando el mismo ejecutivo tenía el control de la elecciones y donde ahora misteriosamente confunde el concepto de ciudadano al de sociedad civil en la ANTV?

¿ Porque el ejecutivo sigue hablando de Ente Autónomo cuando no existe? Porque en la ANTV  el ministro de Tics tiene asiento en la junta directiva sumándose a uno que nombra directamente el presidente, y otro las universidades en un concurso organizado por la ministra de educación y otro mas lo nombran los gobernadores, donde no hay autonomía administrativa, ni financiera ni técnica.

Ojalá el Ministro de Tics, el Ministro Germán Vargas Lleras y el actual congreso respondan estos interrogantes."